Fallecimiento

Los cadáveres de Larraza y Olavarrieta fueron amortajados con el hábito de San Francisco y acompañados todo el trayecto a pie por una enorme comitiva: Abrían marcha los ordenanzas del Banco de Vizcaya, en el que prestaba sus servicios Larraza, y algunos amigos particulares, portadores de hachas blancas, llevando las de respeto los Sres. Saracho y Serrano, por el Colegio Vizcaíno de Árbitros; señores Echeguren y Díaz, por el Baracaldo F. C.; Yanke, por el Club Deportivo de Bilbao; Bandrés, por la Federación Vasconavarra de Alpinismo; Olarte y Revuelta, por el Acero Club de Olaveaga; Govillar (F.), por el Club Indauchu; Larrinaga, por la Federación Vizcaína de Futbol; Cruza y Dunabeitia, por el Erandio Club; Ibarrondo, por la Sociedad Deportiva Deusto; Isasi, por la Asociación de Periodistas Deportivos; Landa, por el Cluh Basconia: Lazurtegnii y Vallana, por el Arenas; Zorrozua, por la Cultural; Zubiria, por la Federación Atlética; Urquijo, por el Club Abandotarra; Ortiz, por el Sestao Sport, y dos señores en nombre del Banco de Vizcaya. Seguía el clero parroquial con cruz alzada, y a continuación los cadáveres de los dos jóvenes. El cuerpo de Cosme Olvarrieta lo llevaban a hombros por turnos, jugadores y socios del Basconia, mientras que el de Jesús Larraza lo llevaban jugadores y ex jugadores del Athletic. Detrás de los cadáveres seguían las presidencias del duelo, formada la primera por José Larraza, hermano del difunto, y un primo de este, acompañados de dos señores sacerdotes, y la segunda, por el Ayuntamiento en pleno de San Miguel de Basauri, con su alcalde a la cabeza y el pendón municipal; el párroco de la localidad, el jefe del puesto de la Guardia civil y D. Manuel de la Sota, presidente del Athletic Club, y detrás la Junta en pleno del Athletic y del Basconia, el Presidente de la F. R. V. de Futbol, Sr. Acha; representaciones de Clubs y entidades, y una comitiva inmensa, que cubría la amplia carretera en un larguísimo espacio, cantándose durante el trayecto varios responsos por el clero. (El Liberal, del 29 de mayo de 1926)

Al día siguiente, a las diez de la mañana en la Parroquia de San Fausto de Arizgoiti, se celebró el funeral por Jesús Larraza y Cosme Olavarrieta. Unos días después, el Athletic organizó otro funeral para recordar a Larraza en la Parroquia de San Vicente de Abando en Bilbao.